Nuestros servicios de clasifican en tres grandes bloques.

Sexología y terapia sexual:

Terapia sexual individual o en pareja
La Terapia Sexual hace referencia a un conjunto de técnicas empleadas para solucionar o mejorar la vida sexual de las personas que solicitan este tipo de ayuda, cuando existe un problema o disfunción.

Los problemas más habituales objeto de terapia sexual son: eyaculación precoz, eyaculación retardada, problemas de erección, falta de deseo, excitación baja, anorgasmia, dispareunia y vaginismo.

¿En qué consisten las sesiones?

En primer lugar, se hace una evaluación, que consistirá en una recogida de información sobre la vida sexual de la persona, desde la pubertad hasta el momento actual. También se recogerá información sobre la relación de pareja a nivel no sexual, sobre el estilo de vida y datos sobre salud.

Si las causas orgánicas o médicas están descartadas, con toda la información, se propondrá un plan de trabajo adaptado a la pareja o persona individual.

Si existe sospecha de que las causas puedan ser orgánicas, se derivará al profesional correspondiente.

La terapia sexual puede realizarse de forma individual o en pareja, es decir, que no es imprescindible tener pareja para solucionar algunos tipos de problemas. Aunque se realice en pareja, las sesiones suelen ser individuales en un primer momento y posteriormente pueden ser conjuntas. Es muy frecuente que ambos miembros tengan algún tipo de problema sexual, por lo que ambos trabajarán de forma conjunta e individualmente.

La terapia sexual en pareja se diferencia de la terapia sexual individual, en que se evalúa y se trabaja con ambos miembros. La terapia sexual individual trabaja solo con un miembro, aunque en ocasiones se requiera la colaboración de la pareja.

Las técnicas que se utilizan son técnicas psicológicas: identificación, control y modificación de pensamientos y técnicas de desensibilización sistemática; técnicas de relajación.

También se utilizan técnicas sexuales: focalización del placer, reaprendizaje en masturbación, técnicas específicas asociadas a cada problema, erotización personal y búsqueda de estímulos eróticos, etc…

Otra parte de la terapia consiste en la transmisión de información sobre aspectos de biología sexual (anatomía y fisiología), y sobre modelos sexuales (revisión del concepto de sexualidad y mitos).

En resumen, en una terapia sexual se trabajarán a nivel psicológico, los miedos que preocupan a la pareja y las emociones asociadas, y a nivel pedagógico, la información y las técnicas sexuales adecuadas.

La terapia sexual es una terapia que realiza la pareja o persona, en su vida cotidiana. El papel del terapeuta es guiar en esas tareas o técnicas y comprobar que se realizan correctamente, a lo largo de las sesiones.

¿Cuánto dura este tipo de terapia?

Este tipo de terapia tiene una duración media de entre 4 y 9 meses (muy variable), con excepciones dependiendo del tipo de problema con el que se acuda. Las sesiones suelen ser semanales, y a medida que se van alcanzando los objetivos, pueden espaciarse en el tiempo, proponiendo una sesión mensual de seguimiento.

Es muy importante que la terapia finalice cuando el terapeuta lo indique, puesto que muchas veces, se alcanzan los primeros objetivos, y la pareja siente que puede solucionar el problema sin ayuda, con lo cual se abandona la terapia. En el caso de que una persona o pareja desee abandonar una terapia antes de que el terapeuta lo indique, deberá comunicárselo al terapeuta, para recibir unas recomendaciones finales, con el objetivo de que los avances puedan perdurar en el tiempo.

La duración de las sesiones en consulta suele ser de unos 60 minutos aproximadamente,

¿Es efectiva la Terapia Sexual?

Esta terapia proporciona resultados muy positivos, pero el éxito dependerá fundamentalmente de la implicación personal. La pareja o persona que acuda a terapia debe implicarse personal y emocionalmente en la solución de su problema. Deberá creer que tiene solución y que ésta está en sus manos. La implicación activa, con la realización de las tareas, será fundamental para la solución.

Con todos estos factores, la gratificación que supone superar un problema sexual es enorme, ya que la buena sexualidad y los buenos afectos pueden proporcionarnos grandes dosis de bienestar y felicidad.

La Terapia Sexual es tremendamente agradecida, tendiendo un elevado porcentaje de éxito en la solución total del problema.

Otro aspecto positivo de este tipo de terapia es que se aprende a ver la sexualidad de una forma diferente, mucho más enriquecida y con mayor variedad de técnicas y repertorio sexual.

 

Asesoramiento sexológico

El asesoramiento sexológico es un tipo de servicio que consiste en una o pocas sesiones de orientación o apoyo ante dificultades sexuales, no necesariamente disfunciones.

Se diferencian de la terapia en que los asesoramientos tienen una duración más breve y son menos directivos.

Mientras que en las terapias, se mandan una serie de técnicas y llevan un seguimiento periódico por parte del terapeuta, en los asesoramientos, la persona o pareja usa la información que proporciona el terapeuta como considere, pudiendo aplicar las técnicas o no.

En sexualidad, son asesoramientos aquellas consultas en las que se quiere conseguir información sobre un tema concreto o hablar de  problemas sexuales, o requerir técnicas sexuales, sin querer iniciar una terapia.

 

Sexología positiva

La sexología positiva es un servicio que ofrecemos para ayudar a todas aquellas personas a crecer en el ámbito de la sexualidad. Aquí se englobarían aquellos aspectos que pueden mejorar: vencer la rutina, mejorar la calidad de las relacioens sexuales, mejorar la comunicación en sexualidad, etc…

Es un servicio muy parecido al asesoramiento sexológico.

 

Terapia de pareja

La Terapia de Pareja es un tipo de terapia cuyo objetivo es mejorar la calidad de la pareja o solucionar los problemas de ésta.

Los problemas más habituales objeto de una terapia de pareja son: problemas de comunicación, falta de entendimiento en cosas cotidianas, pérdida de confianza, rutina y desmotivación (pérdida de ilusión) e infidelidad.

Las sesiones se estructuran en unas primeras visitas para recogida de información y evaluación del estado de la pareja. Se evaluarán modelos de pareja, estilo de vida, nivel de estrés personal, comunicación en pareja, afectos y sexualidad, y expectativas de cambio de cada miembro.

En función de la información recogida y de las expectativas de la pareja, se establecerá un plan de trabajo para mejorar o reestructurar la pareja, siempre y cuando esa sea la mejor solución.Cada uno de estos problemas se trabajará de una forma distinta, teniendo en cuenta las expectativas y motivaciones de la pareja.

¿Cómo son las sesiones?

Para una terapia de pareja es imprescindible que acudan los dos a la consulta de forma voluntaria, aunque algunas sesiones podrán ser individuales para la recogida de información.

Si no acuden los dos, no será una terapia de pareja, sino un asesoramiento psicológico individual. Las primeras visitas podrán ser individuales o una sesión compartida (media hora cada miembro).

Posteriormente, cuando el trabajo comience a realizarse, las sesiones serán conjuntas para exponer los problemas y la capacidad de solucionarlos.

Esta terapia la hace la pareja, con su trabajo personal y en su vida cotidiana, sirviendo las sesiones para exponer aquellas dudas y problemas y proporcionar las herramientas necesarias y el apoyo psicológico y profesional por parte del terapeuta.

Se mandarán trabajos personales o en pareja para realizar en casa. Podrán ser ejercicios por escrito o ejercicios a realizar en pareja, tales como aprendizaje de habilidades comunicativas, resolución de problemas, realización de actividades agradables y/o actividades para mejorar la sexualidad y los afectos.

¿Cuál es su duración aproximada?

Es una terapia centrada en el presente y el la solución de problemas.

Este tipo de terapia suele tener una duración breve (unos pocos meses), pudiendo establecer algunas sesiones se seguimiento posterior. Es un tipo de terapia corta si no existen otro tipo de problemas personales o emocionales asociados.

En estos casos, puede ser conveniente el establecimiento de unas sesiones de asesoramiento individual.

La duración de las sesiones en consulta es de 60 – 80 minutos aproximadamente.

¿Es efectiva esta terapia?

Este tipo de terapia funciona cuando existe la voluntad por parte de ambos, de solucionar los problemas. El cariño y los afectos positivos deben predominar y el deseo de continuar en la pareja.

Cuando la pareja comienza una terapia de pareja sin tener claro que se desea permanecer en la pareja, o con dudas fuertes por parte de alguno de los miembros, las sesiones pondrán de manifiesto que la mejor solución será la separación.

En los casos en que la pareja apuesta por ella misma, los resultados son muy positivos y las habilidades aprendidas servirán para la solución de futuros problemas.

Hay que tener en cuenta que una pareja que funciona bien no es aquella que no tiene problemas, sino aquella que tiene las herramientas y habilidades necesarias para solucionarlos.

¿Qué NO es una terapia de pareja?

Una terapia de pareja no es una terapia individual para solucionar los problemas personales o psicológicos de uno o ambos miembros. Los objetivos son conjuntos para el bienestar de ambos.

Una terapia de pareja no es una terapia familiar, por lo tanto, no se implicarán en la terapia a padres, hijos u otras terceras personas.

Por último, una terapia de pareja no sirve para que el terapeuta indique quien de los dos miembros tiene razón en algún aspecto. Se trata de que la pareja sea capaz de gestionar sus diferencias, sin que ello suponga un conflicto.

 

Terapia o asesoramiento individual:

El asesoramiento o terapia individual sirve como espacio para exponer todo aquello que preocupa, hace sufrir o no permite avanzar a la persona.
Existen muchos tipos de problemas que son objeto de asesoramientos. Por ejemplo, si una persona tiene dudas sobre la continuidad de su relación de pareja, requerirá de algunas sesiones de asesoramiento para aclarar esas dudas.

Las infidelidades, cuando la pareja no lo sabe, también son objeto de asesoramiento o apoyo, que puede desembocar en una terapia de pareja posterior o en la aclaración de los sentimientos encontrados.

Problemas con la orientación sexual, celos o desconfizanza, problemas personales (timidez, problemas para encontar pareja, miedo a las relaciones, etc…) o simplemente la búsqueda de información sobre temas de pareja, son típicos problemas que requerirán algunas sesiones de asesoramiento o terapia breve.

Normamente se trabajan técnicas cognitivas, emocionales y asertivas para mejorar el malestar que produce el problema o problemas.

En resumen, los asesoramientos son sesiones de consulta psicológica para hablar de algún tema que preocupa, entender y apoyar a la persona, analizar las posibles soluciones y proporcionar técnicas necesarias, si así lo desean.

Apoyo especializado en rupturas o desengaños amorosos
De la experiencia trabajando problemas de pareja, Sexalus decide ofrecer un servicio  especializado en apoyo en duelo y reestructuración posterior.
Una ruptura o desengaño amoroso puede ser una de las situaciones más difíciles por las que puede pasar una persona a lo largo de su vida. El torbellino emocional que acontece después de una separación es un proceso que merece la pena analizar y trabajar correctamente.
Un duelo bien hecho proporciona una estabilidad emocional posterior, y dotará a la persona de recursos psicológicos para rehacer y seguir su vida.
No solo ofrecemos el apoyo en el duelo sino que consideramos necesario un apoyo específico en la fase posterior: la reestructuración de la propia vida.
La persona tiene que enfrentarse de nuevo a la búsqueda de amistades y aficiones y tiene que asumir roles que antes no asumía.
De aquí se derivan dos tipos de servicios independientes:
Duelo o apoyo inmediato tras la separación
Reestructuración posterior y apoyo social